La influencia del grupo a esta edad es muy elevada. Para una adolescente ser aceptada socialmente puede ser una de sus principales necesidades. Esto sucede tanto en adolescentes excesivamente dependientes, como en adolescentes no dependientes. Por ello, muchas veces se observan conductas de imitación.
Para proteger a las adolescentes de ello, lo más importante debe realizarse algunos años antes, favoreciendo que la chica no tenga excesiva dependencia interpersonal, ni excesiva necesidad de aceptación y apoyo, que tenga asertividad, criterio propio, y cierta independencia. Aun así, e incluso si esto ya se ha logrado, puede darse riesgo de imitación, para conseguir la aceptación en un grupo. En estos casos se debería de hablar con la chica, e incluso con la mediación de algún profesional, para favorecer la toma de perspectiva, o incluso el alejamiento de éstas si la presión grupal hacia las autolesiones es muy elevada.