Guerreras de corazón naranja

Somos mujeres, cada una en la batalla con su propia circunstancia vital, pero a todas nos une nuestro gran papel en la vida, el más apasionante y complicado a la vez, el papel de ser madres de niños y niñas con necesidades educativas especiales. Madres guerreras, porque todas tenemos hijos con TDAH. De corazón naranja, porque el trastorno de nuestros hijos es un color más de los muchos que tiene su apasionante personalidad.

El camino de la maternidad con un hijo con dificultades es complicado. Lleno de subidas y muchas bajadas, repleto de miedos e incertidumbre, que en ocasiones son difíciles de manejar. Es un recorrido por el que muchas familias transitan en soledad, y en esa soledad y en la búsqueda de apoyo como cuidadoras, nos fuimos conociendo a través de redes sociales. Guerreras de corazón naranja surge desde una necesidad de visibilizar el trastorno de nuestros hijos y sensibilizar a la sociedad que convive con ellos en el día a día.

¿Por qué nos hemos unido?

Somos veinte mujeres, de todas las comunidades de España, con un objetivo común: ofrecer apoyo a aquellas familias que necesitan información y formación, que necesitan guía en este camino, que necesitan saber que no están solas y que juntas podemos. Nuestro principal objetivo es convertirnos en brújula para todas aquellas familias, que como las nuestras, en algún momento, han perdido la orientación.

Necesitamos que no sólo se entienda y se apoye a nuestros hijos, sino a los muchos afectados que conviven y luchan diariamente con este trastorno. Niños que desde su más tierna infancia son juzgados, etiquetados, aislados y humillados, ya no sólo por sus iguales, sino por la sociedad en general. Nuestra gran batalla es su educación en las escuelas. Cada año, convivimos con muchos profesores que no entienden y no apoyan a nuestros hijos por su falta de implicación y formación ante este trastorno.  

Guerreras de corazón naranja surge desde una necesidad de visibilizar el trastorno de nuestros hijos y sensibilizar a la sociedad que convive con ellos en el día a día.

Miramos atrás y recordamos siendo muy pequeños, agotarnos con tan solo observarles. Cuando aún no andaban y se desplazaban sin necesidad de levantarse del suelo. Su fuerza, su intensidad, su permanente inquietud… Recordamos esas sonrisas seductoras capaces de atrapar a la más esquiva de las miradas. Recorrer caminos y aceras corriendo detrás de ellos cuando salíamos de casa.  Imaginábamos que eran niños despiertos y escuchábamos frases como:  «No te preocupes», «Los niños tienen que moverse”; «Yo prefiero un niño movido que un niño mueble»; etc. El TDAH aterriza en nuestras vidas sin avisar, sin nombre todavía, sin recursos, sin motivos, sin entenderlo… como una barca que te lleva a la deriva.

Apoyo y recursos para las familias

Para ofrecer apoyo a todas las familias que lo necesiten, hemos creado un grupo en Telegram, totalmente gratuito, en el que pueden exponer sus dudas, sus vivencias, sus logros y sus dificultades en el camino. En él hay familias con hijos de todas las edades, pero todas vivimos situaciones parecidas. Los pequeños logros de otros casos nos dan aliento en muchos momentos, y los miedos compartidos no se convierten en monstruos. Nos entendemos, nos apoyamos, nos informamos y, sobre todo, nos acompañamos.

El TDAH aterriza en nuestras vidas sin avisar, sin nombre todavía, sin recursos, sin motivos, sin entenderlo… como una barca que te lleva a la deriva.

También hemos puesto en marcha una cuenta en Facebook y en Instagram, con la intención de dar visibilidad al TDAH, un escaparate y un espejo en el que cualquier familia con un miembro diagnosticado de TDAH, o incluso adultos con TDAH, se pueda mirar. En ella podrán encontrar testimonios, estrategias, directos con profesionales, información acerca del trastorno y herramientas que les permitan convivir con él en el día a día.

Hacemos un llamamiento a todos los profesionales del ámbito educativo. A los que conocen el trastorno y a los que no. A los que creen que lo hacen bien y a quienes quieren aprender a estar un poco más cerca de sus alumnos. Queremos empoderarles como figuras vitales en la vida de nuestros hijos. Necesitan herramientas, porque comprobamos en el día a día de nuestros hijos en el colegio, que no las tienen. Por eso, a todos los profesores que quieran acercarse a nuestra pequeña gran familia, les atenderemos con los brazos abiertos. Les necesitamos, nuestros hijos les necesitan formados y con recursos.

Por último, dentro de todo este movimiento, en que nos van dando voz desde diferentes medios de comunicación, queremos romper con el estigma de lo que supone tener un trastorno del neurodesarrollo a nivel social. Necesitamos que el resto de la sociedad lo conozca y podamos hablar de ello con naturalidad. No queremos abrir puertas a nuestro paso como madres guerreras, queremos abrir las puertas de una vida digna a nuestros hijos, los auténticos héroes de toda esta historia.

¿Dónde nos puedes encontrar?

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